Durante el 2022 ha llovido un 19 % más de lo habitual en la cuenca del Canal, un hecho que eleva la importancia de la temporada de control de inundaciones, un programa que anualmente desarrolla el Canal de Panamá para prevenir situaciones de riesgo en las comunidades aledañas, así como para los trabajadores y las estructuras canaleras. 

Durante este periodo, se designa a un equipo de meteorólogos e hidrólogos para la vigilancia continua de las condiciones hidrometeorológicas en la Cuenca.  El grupo tiene la misión de identificar, prevenir y dar respuesta oportuna ante cualquier amenaza de inundación. 

Erick Córdoba, gerente encargado de la División de Agua del Canal de Panamá, explicó que existe una serie de protocolos que se activan durante esta temporada, por tratarse de los meses en los que históricamente se presenta la mayor cantidad de lluvias, y que coincide justamente con los niveles máximos operativos de los embalses de agua dulce del Canal. 

Pruebas que fortalecen la seguridad

El 2022 ha sido influenciado por los efectos del fenómeno de La Niña, y por segundo año consecutivo, las lluvias han estado por encima del promedio histórico, una situación inusual en la última década caracterizada por años muy secos, incluyendo el 2015 y 2019, el segundo y quinto año más seco de los últimos 72. 

Este excedente de lluvias originó que se adelantara tres meses la prueba operativa que se realiza en octubre de cada año en el vertedero de Gatún. En el ejercicio, se determina, con la ayuda de un equipo multidisciplinario, el buen funcionamiento de las 14 compuertas de esta estructura que se utiliza para realizar vertidos en caso de que sea necesario, debido a un aumento en el nivel del sistema de embalses del Canal. 

La prevención: aspecto fundamental

En su reciente visita a Panamá, Mami Mizutori, representante especial del Secretario General de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR), destacó la importancia de los esfuerzos que realiza el Canal de Panamá en materia de prevención de riesgos. 

Tras recorrer algunos puntos de la vía interoceánica, la también jefa de la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR), pudo constatar cómo la operación del Canal toma en consideración nuevos aspectos relacionados al cambio climático, y con ello prevenir situaciones de riesgo. 

Pero los beneficios también llegan a la población del país, pues a juicio de la especialista, toda la información que el Canal recolecta para mantener segura su operación es de gran utilidad para prevenir riesgos de desastres que afecten a la población en general. 

Gestión comunitaria, una herramienta eficaz

Las acciones de prevención que desarrolla el Canal están dirigidas principalmente a proteger a las personas; por ello, se tienen claramente identificadas las áreas vulnerables ante posibles inundaciones. En estos puntos, el trabajo social no cesa. Lisbeth Chillambo, especialista interdisciplinaria de la organización, puede dar testimonio de ello. 

Se trata de las comunidades de Santa Rosa y Guayabalito, donde, según Chillambo, durante todo el año se realizan actividades que buscan fortalecer esos protocolos conjuntos en los que han estado trabajando el Canal y las comunidades desde hace años. 

Para ello, se programan capacitaciones, se les dota de equipos adicionales, se repasan los protocolos y se ejecuta una serie de acciones que buscan incrementar la preparación de los lugareños para hacer frente a eventualidades que les pudieran poner en peligro. 

Durante el 2022, se trabajó con los líderes comunitarios en la revisión del plan de acción, a fin de incluir aquellas acciones que fueron recomendadas por el Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC), tras el simulacro de evacuación desarrollado el año anterior. 

Mencionó, también, que se lograron acercamientos con el Centro Escolar de Santa Rosa, a fin de conocer su plan de evacuación e integrarlo al plan comunitario, para lograr que, ante una eventualidad, la comunidad pueda responder de forma organizada y eficiente. 

Las acciones implementadas durante la temporada de control de inundaciones están dirigidas principalmente incrementar la seguridad de quienes viven áreas vulnerables, así como la de los trabajadores del Canal. Además, se busca proteger las instalaciones canaleras para seguir brindando un servicio seguro, eficiente e ininterrumpido al comercio mundial.