Protección activa de la cuenca: patrullaje, monitoreo y conservación
Para proteger la cuenca hidrográfica del Canal y garantizar la conservación del recurso hídrico, tanto en calidad como en cantidad, […]
Para proteger la cuenca hidrográfica del Canal y garantizar la conservación del recurso hídrico, tanto en calidad como en cantidad, es fundamental el cuidado de los bosques que la nutren. Por ello, el Equipo de Vigilancia y Monitoreo (HIS-VM) de la División de Sostenibilidad Socioambiental del Canal desempeña un papel clave en la conservación y sostenibilidad de la cuenca.
A través de patrullajes constantes en áreas específicas, el equipo busca zonas críticas y vulnerables donde se hayan realizado tala, quema ilegal de rastrojos o deforestación de bosques secundarios y primarios. Estas prácticas reducen la vegetación que protege el suelo y regula el ciclo del agua, fragmentan los ecosistemas y amenazan la capacidad de regulación hídrica de la cuenca.
Mediante programas GIS avanzados (como ArcGIS Pro) se procesa, analiza, almacena y despliega información geográfica. En el marco del patrullaje, esta plataforma es crucial ya que permite combinar eficientemente datos de campo, imágenes satelitales y mapas temáticos.
Cabe señalar que la labor de vigilancia y monitoreo también abarca otras áreas de suma importancia, como la cobertura vegetal en zonas tipo: mancha poblada, minería, cota 100 y cota 260, entre otras variables relevantes. Por ello, el monitoreo continuo de estas zonas facilita la detección temprana de anomalías o actividades ilegales, asegurando la protección y sostenibilidad del entorno.
Toda la data obtenida se utiliza para presentar denuncias ante las autoridades competentes, lo que permite implementar medidas de restauración ecológica orientadas a conservar los bosques y evitar la degradación de los ecosistemas. Esta información es esencial para fortalecer la gobernanza ambiental en las comunidades, diseñar estrategias de prevención frente a nuevas afectaciones y dar seguimiento a las áreas previamente impactadas.
De esta manera, se garantiza no solo la recuperación de la cobertura vegetal perdida, sino también la protección de la biodiversidad, la regulación hídrica y la sostenibilidad del recurso agua, vital para el funcionamiento del Canal y para el bienestar de las poblaciones que dependen de la cuenca hidrográfica.