Monitoreando el futuro del jaguar en Panamá
Presentación de los resultados del censo del jaguar que marcan el camino para su conservación
Como parte de los esfuerzos para conservar al jaguar, la Fundación Yaguará Panamá, lidera el Censo Nacional de Jaguares, un proyecto respaldado por el Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF, por sus siglas en inglés), apoyado por el Ministerio de Ambiente (MiAMBIENTE), y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
Este censo permite monitorear la población de jaguares, utilizando herramientas como cámaras trampa y telemetría con collares GPS (siglas en inglés de Sistema de Posicionamiento Global) para estudiar los movimientos de los jaguares y otros felinos silvestres. De esta manera, se obtienen datos sobre las áreas que utilizan, sus hábitos, distancias que recorren y horarios en los que cazan. Esta información es clave para tomar decisiones efectivas para la conservación de la especie y el bienestar de los ecosistemas.
El censo
El pasado 20 de febrero, Ricardo Moreno, presidente de la Fundación Yaguará, presentó los resultados del censo de jaguares. Durante la conversación, abordó un tema clave: el conflicto entre jaguares y la ganadería.
Ricardo Moreno, Presidente de Yaguará Panamá, presentando los resultados del censo de jaguares.
La disminución de las presas naturales del jaguar ha llevado a que busque alternativas más accesibles, como el ganado y otros animales domésticos. La falta de manejo adecuado en algunas fincas deja vulnerable al ganado que se alimenta cerca del bosque, lo que genera conflicto con los ganaderos y, en muchos casos, termina con la muerte del jaguar.
Los jaguares suelen encontrarse en las zonas de las cuencas donde hay ríos y quebradas. En este sentido, el ecosistema que brinda la cuenca del Canal se convierte en un elemento esencial para especies como el jaguar, que dependen de la continuidad de estos hábitats para su supervivencia. Por esta razón, el Canal es una parte fundamental en la gobernanza del proyecto GEF 7, que impulsa la conservación de felinos silvestres y especies de presa a través de alianzas público-privadas y la gestión de conflictos entre humanos y jaguares en Panamá, como miembro del Comité Directivo y el Grupo Asesor de Género . Además, el Canal ha desempeñado un papel fundamental en este proyecto, participando en la instalación de cámaras trampa en el Parque Nacional Chagres, una zona clave para la protección del jaguar.
Panthera onca
Fotografía de jaguar cortesía de Yaguará Panamá.
El jaguar es el felino más grande de América y el tercero en tamaño del mundo. Desempeña un papel crucial en el equilibrio de los ecosistemas, ya que, como depredador tope, regula las poblaciones de otras especies y mantiene la salud de su hábitat, que es clave para la biodiversidad.
Panamá es fundamental para la conservación del jaguar, ya que el istmo es la última y más estrecha porción del Corredor Biológico Mesoamericano, un puente terrestre natural que ha permitido la conexión entre poblaciones de jaguares desde hace miles de años. Sin embargo, la población de jaguares está disminuyendo. Esta especie ha perdido más del 40 % de su hábitat en Panamá y está en peligro crítico de desaparecer. Entre 1989 y 2023, se han reportado 395 jaguares muertos en el país.
Algunos ganaderos optan por matar al jaguar, creyendo que así resolverán el problema. Sin embargo, esto genera un vacío en el territorio, lo que facilita que otro jaguar llegue y lo reemplace, perpetuando el conflicto. Si bien el monitoreo ha demostrado que los jaguares se mueven principalmente dentro del bosque, el ganado a menudo entra en estas áreas, aumentando el riesgo de depredación.
Para abordar este problema, se ha trabajado en conjunto con comunidades y agricultores, quienes tienen las herramientas y la capacidad para mejorar la situación. Los esfuerzos se centran en la concienciación y la reestructuración en las fincas, implementando planes de manejo con medidas antidepredación y educación ambiental. Un ejemplo efectivo es el uso de cercas electrificadas que mantienen a los jaguares alejados sin hacerles daño.
Además, el proyecto tuvo descubrimientos inesperados. Durante el monitoreo, se capturó un puma al que se le colocó un collar GPS. Los datos revelaron que este felino tiene el rango de movimiento más amplio registrado en toda América, recorriendo aproximadamente 1,000 km².
Moreno destacó la importancia de este censo, el cual ha recibido reconocimiento internacional. Por ejemplo, el informe del Programa Global de Vida Silvestre del 2023 calificó el Censo Jaguar de Panamá como el único proyecto altamente satisfactorio entre más de 50 propuestas de 38 países. Además, este proyecto ha permitido recopilar información para la publicación del primer artículo científico sobre el movimiento espacial de los jaguares en la región.
Colaboración integral
Más allá de los estudios científicos, la Fundación Yaguará y el Canal de Panamá, también trabajan con las comunidades locales, especialmente con mujeres, en el diseño y ejecución de estos proyectos. Este enfoque fortalece la sostenibilidad de los esfuerzos y promueve un desarrollo más equitativo. Sin embargo, la inclusión de las mujeres va más allá de la equidad de género, su participación en proyectos de conservación aporta nuevas perspectivas, facilita la transmisión de conocimientos dentro de las comunidades y mejora la gestión de los recursos naturales.

Los bosques de Panamá son un refugio clave para los jaguares en las Américas. Pero con la expansión de la ganadería y otras actividades económicas, su territorio se está reduciendo, lo que fragmenta su hábitat y pone en riesgo su diversidad genética, esencial para que la especie sobreviva.
Gracias a estas colaboraciones, entendemos que el conocimiento es fundamental para la conservación del jaguar. Cada dato recopilado nos acerca a soluciones más efectivas y sostenibles, demostrando que la coexistencia entre humanos y vida silvestre es posible cuando comprendemos y protegemos nuestro entorno.
Fotografías de jaguares cortesía de Yaguará Panamá.