Dos días de mantenimiento simultáneo en una de las compuertas de las esclusas de Miraflores y en los neumáticos de defensa de las esclusas de Pedro Miguel, fueron completados este mes por el Canal de Panamá.
Las tareas son parte de la programación de la vía acuática para mantenerse como una ruta segura y confiable.
El mantenimiento es clave para asegurar que el Canal de Panamá cuente con infraestructura y equipos en condiciones óptimas, a sus 106 años de vida.
Los trabajos en Miraflores duraron 34 horas y se llevaron a cabo en la compuerta 122, en el nivel inferior del carril oeste de la esclusa, que da hacia el mar. El trabajo consistió en el remplazo de bujes de horquilla y yugo, que son los que sostienen la compuerta para su operación regular.
Wilfredo Yau, ingeniero de reacondicionamiento de la División de Esclusas y Mantenimiento de Instalaciones explicó que las compuertas de las esclusas panamax “reciben mantenimiento cada 30 años, pero le estamos haciendo un cambio de bujes para asegurar que llegue a su fecha regular”.
En el mantenimiento en las esclusas de Miraflores participaron la División de Esclusas y Mantenimiento de Instalaciones en conjunto con las divisiones de Mantinimiento de Flota y Equipo, Ingeniería y Dragado.
Para dicha labor se utilizó la grúa Titán, la única capaz de levantar las compuertas del Canal de Panamá.
Aprovechando las obras en el carril oeste de las esclusas de Miraflores, fueron remplazados de manera simultánea los neumáticos de defensa ubicadas las esclusas de Pedro Miguel.
Gerardo Ríos, capataz de Mantenimiento de Infraestructura de las esclusas de Pedro Miguel, detalló que “estas dos defensas ayudan a la embarcación y al capitán a alinear el barco con la recámara. Estas llantas giran y protegen la infraestructura del Canal, pero también se protege a la embarcación”.
Los neumáticos de defensa, que pesan 14 mil libras cada uno, son remplazados como parte de los programas de mantenimiento o cuando muestran algún nivel de desgaste.
Debido al nivel del lago Gatún fue necesario el apoyo de los buzos del Canal de Panamá para los ajustes necesarios de las defensas bajo el agua.
Las obras en las esclusas de Pedro Miguel tuvieron una duración de 12 horas.
Aunque el carril oeste de las esclusas se mantuvo cerrado durante el mantenimiento, el tránsito de buques continuó de manera regular por el carril este.