El cáncer es la única enfermedad que si es detectada tempranamente tiene cura; la hipertensión, la diabetes y la obesidad se pueden controlar, pero no desaparecen, ni se curan. El cáncer, diagnosticado a tiempo, es extraído y, de ser necesario, con medicación, quimio y radioterapia puede llegar a la remisión (el cáncer no está presente, ni activo) y desaparecer por completo y de manera permanente.
Algunos factores de riesgo de cáncer de mama o próstata son:
- Antecedentes familiares de cáncer de mama o próstata
- Edad, porque aumenta las probabilidades después de los 50 años
- Raza o el grupo étnico, por los estilos de vida propios de cada cultura
- Patrones de alimentación (exceso de carnes rojas, picantes, lácteos, dieta rica en grasas
- Consumo excesivo de alcohol (más de tres copas por semana)
- Obesidad, porque el exceso de peso y la concentración de tejido adiposo incrementa el riesgo
- Tabaquismo
- Menopausia muy tardía (sobre los 55 años),
- Primera menstruación muy temprana (antes de los 12 años),
- Mujeres sin hijos o nacimiento del primer hijo después de los 30 años
- Estrés
- Exposición a radiaciones ionizantes
- Vida sedentaria
- Dolencias benignas en la mama (quistes) – Terapias hormonales
Las pruebas diagnósticas para buscar el cáncer de mamas son el autoexamen, el ultrasonido, la mamografía, la tomografía axial computadorizada (TAC), la resonancia magnética nuclear (RMN), la termografía y la biopsia que nos ayudan a resolver con los tratamientos de cirugía con extracción del tumor o en casos avanzados la mastectomía (eliminación de la mama), radioterapia, quimioterapia y la combinación de las dos en el tratamiento conservador, si hay metástasis.
El autoexamen
Observa tus senos en un espejo para detectar diferencias entre una y otra mama: alteraciones en el tamaño, en la forma en el contorno de cada seno bultos. Palpa los senos mojados y enjabonados para detectar si hay durezas, retracciones del pezón.
También observa la piel para ver si presenta modificación en la textura, ulceración, enrojecimiento de la piel o en los pezones, dolor o hinchazon.
Tu salud garantiza tu calidad de vida, cuídala, vigila, busca cualquier alteración, encuéntrala y resuélvela con ayuda médica para muchos años de bienestar personal para ti y tu familia.
La autora es enfermera de Salud Ocupacional