Conectividad 5 minutos de lectura

Innovación y capacidad al servicio del Canal

La División de Administración y Mantenimiento de Flotas y Equipos del Canal se prepara para ingresar un remolcador.

Esa mañana nublada de mayo en el dique seco de “La Industrial” como se le suele llamar a la División de Administración y Mantenimiento de Flotas y Equipos del Canal, en la provincia de Colón, trabajadores se aprestaban a ingresar un remolcador para darle mantenimiento mayor (o carenado), y de máquina, mientras otros estaban absortos en sus tareas en otras tres de estas embarcaciones.

En términos navales, carenado es un conjunto de trabajos realizados a la carena de las embarcaciones, la cual corresponde a la parte sumergida en el agua, también conocida como “obra viva” de la nave.

Por la naturaleza de los trabajos, participan desde buzos, en la primera fase de aseguramiento de la embarcación para sacarla del agua y subirla a los rieles del sincroelevador o para posarla sobre el dique seco. También participaron operadores de grúa, aparejadores, soldadores, armadores, mecánicos torneros, pintores e instaladores de tubería de alta precisión, entre otros.

Remolcador en dique seco
Remolcador en dique seco

En uno de estos remolcadores, el Cerro Majagual, los trabajos incluyen adecuaciones para la certificación de categoría Fifi-1 (Fire fighting), o sea, dotarlo de dos monitores contra incendios y capacidades volumétricas mínimas en términos de descargas contra incendio en metros cúbicos por hora. Este es un requerimiento impuesto a partir de la entrada en operación del Canal ampliado, en junio de 2016, en virtud del creciente aumento en el tránsito de buques que transportan gas natural licuado (GNL).

“Producto del Canal ampliado y de nuestros clientes que navegan con sus productos, en especial GNL, se adquirió seis remolcadores con categoría Fifi-1 entre los 14 de la flota de última generación. Posteriormente nos dimos cuenta de que necesitábamos más remolcadores con esa categoría, así que ahora estamos adecuando a dos con ese requerimiento. Uno, el remolcador Cerro Azul, ya fue adecuado, mientras que el Cerro Majagual se encuentra en este proceso. Ahora tenemos ocho remolcadores categoría Fifi-1”, dijo a El Faro, José Luis Ramírez, gerente de la división de Administración y Mantenimiento de Flotas y Equipos

¿Cuándo hacer un carenado y mantenimiento de máquina?

Los remolcadores del Canal requieren un carenado o mantenimiento mayor cada 5, 7 o 10 años, dependiendo del tipo de equipo. En el caso de los remolcadores más nuevos, como la flota de 14 adquiridos con motivo de la operación del Canal ampliado, entran al dique seco cada siete años, incluso, explica Ramírez, se puede solicitar la extensión de la fecha del mantenimiento hasta seis meses, de ser necesario.

Una vez iniciados los trabajos, la embarcación puede permanecer entre seis a ocho semanas en el dique seco, o bien 12 semanas, si hubiere un deterioro mayor.

Mantenimientos a remolcadores
Mantenimientos a remolcadores

En cuanto al mantenimiento ordinario de la máquina, está especificado hacerlo cada mil, tres mil y cinco mil horas de servicio y, eventualmente el remolcador requiere de un acondicionamiento mayor u overhaul, que para la nueva generación de remolcadores del Canal, se hace cada 40 mil horas.

“Sin embargo, producto de los ejercicios anteriores que hemos hecho de 40 mil horas, y la recomendación tanto de los jefes de máquinas a bordo como del personal de taller, nos hemos dado cuenta de que las piezas que estamos sacando y reemplazando por especificación del fabricante, están en muy buenas condiciones, así que es en el segundo remolcador de la flota de los más nuevos al que le realizamos el mantenimiento de máquinas de 40 mil horas y, tras una revisión de las piezas y de todos los componentes reemplazados, hemos evaluado llevar ese procedimiento a una tiempo mayor de las 40 mil horas”, afirma Ramírez.

Adicionalmente, la división de Administración y Mantenimiento de Flotas y Equipos, en conjunto con la sección de Mantenimiento de Remolcadores de la División de Recursos de Tránsito, evalúa la extensión del reacondicionamiento mayor de estos motores a través de inspecciones periódicas y de las recomendaciones establecidas en un programa de mantenimiento modificado por la compañía GE (General Electric) Transportation de que los motores de estos remolcadores se pueden llevar a cabo de acuerdo con el consumo de combustible, y no solo por el tiempo de servicio, y que este puede variar entre 40 mil a 60 mil horas.

¿Barco varado no paga flete?

Mientras conversaba con El Faro, Ramírez, cuasi que adivinando nuestra siguiente y lógica pregunta, se adelanta a decir que la flota de remolcadores del Canal de Panamá es de 46 embarcaciones, y que el servicio de tránsito requiere de 36 para atender a los buques. Así pues, quedan 8 embarcaciones que pueden estar entre standing by (en espera) del llamado a cualquier asistencia, y en mantenimiento, de tal forma que no se interfiera con la operación de la vía acuática. En otras palabras, aquí no aplica el viejo refrán de “barco varado no paga flete”, porque el Canal no pude darse ese lujo.

#Recientes

Cuenca

De la cuenca al Canal

Omar Rodríguez · 3 mins
Comunidad

Un trayecto inolvidable desde 1914

Jaime Troyano · 3 mins
Comunidad

Canal de Panamá presenta la obra “Canal de Panamá:…

Redacción · 4 mins
Comunidad

El Canal de Panamá conversa con estudiantes la Universidad…

Redacción · 5 mins