Refiriéndose a la importancia de la educación, el poeta español Antonio Machado dijo: “En cuestiones de cultura y de saber, solo se pierde lo que se guarda; solo se gana lo que se da.” Y en términos macro, podríamos agregar que una nación verdaderamente comprometida con las nuevas generaciones gana si ese conocimiento se da con pasión y creatividad.
Es irrebatible que el mundo de hoy demanda nuevas formas de transmitir el conocimiento, y el impacto de la pandemia mundial en la fluidez del mundo tradicional demuestra que la educación debe prepararse, y adaptarse a nuevos escenarios y plataformas. Es tiempo de oportunidades, y el Canal de Panamá es consciente de ello.
En este sentido, con miras a fortalecer su compromiso con el país, el Canal concibió, a inicios de este año, un proyecto para la transferencia de conocimientos de la vía acuática a la juventud panameña. Y esto, sin lugar a dudas, también estrechará los lazos con esta generación incrementando el sentido de pertenencia por el principal activo del país.
Compromiso por la educación
Cuando se trata de un proyecto con un alcance ambicioso, como lo es que llegue a todo el país, la cooperación interinstitucional cumple su cometido. Así fue como los primeros pasos se tradujeron en un acercamiento entre las autoridades del Ministerio de Educación (MEDUCA) y del Canal de Panamá para delimitar los objetivos.
Como resultado de una serie de conversaciones, se decanta en un acuerdo basado en ocho grandes ejes educativos: historia, operación, administración, economía, cuenca, crisis climática, administración del recurso hídrico y proyectos futuros del Canal de Panamá.
Sin embargo, finalizando el primer trimestre del año, se anuncia una pandemia mundial y el proyecto se direccionó hacia un enfoque más tecnológico. El equipo multidisciplinario de ambas instituciones buscó nuevas formas de alcanzar el objetivo y se concluyó que la producción audiovisual y alimentación de contenidos en plataformas tecnológicas eran la mejor opción para llevar los mensajes educativos, especialmente dirigido a estudiantes de primaria, premedia y media. Se prevé que para inicios del último trimestre de este año comience la ejecución del programa.
En esta fase inicial se contempla la producción de cápsulas informativas y programas audiovisuales, que se transmitirán tanto en CanalTV, del Canal de Panamá, así como en otras televisoras locales. Igualmente, el contenido textual de los módulos educativos reposarán en los sitios de internet del Meduca y el Canal de Panamá.
La cooperación entre ambas instituciones nos “permite trabajar de la mano para llevar mensajes puntuales del Canal de Panamá a los salones de clases. Estos mensajes encierran contenido en ejes transversales de la vía acuática. En vista de que el 45 % de la población panameña es menor de 24 años, es importantísimo adaptarlo a la tecnología para que tenga un alcance pleno”, afirma María Gabriela Ávila, líder de la implementación del proyecto educativo Meduca-Canal de Panamá.
El propósito
En palabras de la ministra de Educación, Maruja Gorday de Villalobos, el alcance de este histórico proyecto “permitirá la formación y actitud patriótica en los estudiantes, que no solo valorarán la historia del Canal en sí misma, sino también sus aportes en a construcción del conocimiento, ciencia, innovación y tecnología de vanguardia”.
Es a través de este proceso de construcción de ideas, coyuntural por la Covid-19, pero permanente por el compromiso entre ambas instituciones, que se reivindica “el modelo de gestión de transparencia pública que representa el Canal, así como el de gestión administrativa eficiente que queremos se extienda a todos los niveles educativos del país para conquistar la quinta frontera de pobreza y desigualdad que vemos en muchos sectores del contexto educativo”, acotó Gorday de Villalobos.
En esa línea de pensamiento, Alexis Espino, gerente de la división de Comunicación del Canal de Panamá, afirma que desde la firma de los tratados Torrijos-Carter el 7 de septiembre de 1977 han pasado 43 años, y 20 años desde la transferencia del Canal a manos panameñas, el 31 de diciembre de 1999; sin embargo, debemos profundizar en ese conocimiento ya que “es parte de nuestra identidad, y eso debemos hacerlo llegar a todos los panameños, sin distingo de edad, para que nos apropiemos de la cultura nacional.”
Acercamiento
Espino afirma que el Canal tiene un compromiso permanente con la educación y, al margen de la pandemia, hay que continuar. “Debemos llegarle a la gente a pesar de la situación que vivimos actualmente, y la tecnología será el vehículo para transferir este conocimiento a las nuevas generaciones para que conozcan profundamente el principal activo de la nación”.
La educación a través de los medios tecnológicos no debe representar una brecha entre mensaje y el sentimiento que se genera. Ni tampoco reducir el rigor de los temas y contenidos. Así lo considera uno de los participantes en este proyecto y reconocida figura en redes sociales y de televisión Diego De Obaldía, al afirmar que “es importante que los jóvenes conozcan la historia del Canal. Nuestra historia moderna ha sido básicamente la ruta interoceánica; es nuestro mayor representativo, es lo que más nos define.
Somos unión; ruta de paso. Alguien que se enamora del Canal es alguien que se enamora de Panamá. Yo he ‘birriado’ la historia del Canal, no solo porque tiene un valor positivo en el sentido didáctico y educativo, sino porque la historia panameña es demasiado cool”, añadió.
Sobre las sienes de la juventud de hoy recae el amor y preservación de la historia patria, pero lo cierto es que si los saberes no se adaptan a las nuevas tecnologías y a los tiempos de modernidad, muy poco se logrará.
Este proyecto educativo viene a demostrar, en este tiempo de oportunidad, que el conocimiento, sin importar desde qué forma o medio se transmita, cumplirá su cometido como gran forjador del desarrollo integral de miles de jóvenes panameños.
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