El 2020 puso a prueba nuestra fuerza, solidaridad e ingenio para sobrevivir en condiciones únicas. En un mundo azotado por la pandemia, y que en Panamá ha cobrado más de 6,000 vidas, el Canal se mantuvo operando de manera ininterrumpida, garantizando a sus clientes un servicio seguro y de calidad.
¿Cómo fue posible lograrlo? La respuesta se resume en su gente. El compromiso de su fuerza laboral ha sido fundamental en esta nueva realidad a la que nos estamos adaptando.
“Tuvimos nuestro proceso de aprendizaje en la empresa, y al día de hoy es algo que el colaborador sabe y lleva presente desde que sale del trabajo hasta que llega a su casa. Hemos practicado todas las reglas para protegernos a nosotros, a nuestros equipos de trabajo y a nuestras familias”, explica Leslie Pineda, gerente de Salud y Seguridad Ocupacional.
Durante el 2020 se emitió los protocolos de la gestión Covid-19 que son de obligatorio cumplimiento e involucran las reglas de distanciamiento físico, uso de mascarilla, lavado constante de manos, uso de alcohol y gel alcoholado. También, la limpieza de instalaciones por medio de nebulización por parte de personal de la propia organización que ha sido capacitado para esas tareas. Además, se destaca las pruebas de detección del nuevo coronavirus.
El Canal cuenta con clínicas que dan seguimiento a los trabajadores que padecieron la enfermedad y se reincorporan a sus labores de forma presencial para garantizar su salud y bienestar, mientras que en el Centro de Capacitación Ascanio Arosemena, en Balboa, opera el Centro de Manejo Covid (CMC), que dispone de una línea telefónica que atiende 24/7 las consultas de los trabajadores, y trabaja en coordinación con el Ministerio de Salud (Minsa).
Importante, indica Pineda, que en el Comité de Riesgo y Seguridad Ocupacional, los representantes sindicales de las seis unidades negociadoras participan de forma abierta con información de las áreas que pueden ser reforzadas.
Respuesta ante la adversidad
Esa resiliencia y capacidad del Canal de Panamá de adaptarse a la nueva realidad impuesta por la Covid-19, fue reconocida en noviembre de 2020 por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD, por su sigla en inglés):
“El Canal de Panamá es tan resistente como su personal, y se adaptó a la nueva normalidad rápidamente, incluidos los nuevos protocolos de seguridad, los retos relacionados con el teletrabajo y, en particular, a la incertidumbre”, indica la UNCTAD en su informe.
La UNCTAD reconoció esa tenacidad de los hombres y mujeres del Canal que permitió contar historias como la del 29 de marzo de 2020, cuando transitó el crucero Zaandam, de la naviera Holland America, con pasajeros y tripulantes contagiados de la Covid-19.
En estos 365 días la demanda mundial y las nuevas realidades del mercado también fueron atendidas por el Canal.
“Desde el momento en que se anunció las medidas de bioseguridad y confinamiento en el país, enviamos una carta a los clientes en la que manifestamos que el Canal tiene el compromiso de mantener un servicio seguro e ininterrumpido a todas las naves; un compromiso adquirido por mandato Constitucional”, resalta Marianela Dengo de de Obaldía, vicepresidenta de Comunicación e Imagen Corporativa.
“Mientras el país estaba en un cierre total, continuamos trabajando con una fuerza laboral reducida, con los involucrados de forma directa en la operación de tránsito bajo estrictos protocolos de bioseguridad para proteger no solo a los colaboradores, sino también a la tripulación de las naves usuarias del Canal”, apunta Dengo.
En este periodo no ha habido contagios de trabajadores del Canal ni de tripulantes de los buques relacionados con la operación de tránsito.
El Centro de Manejo Covid
El Centro de Manejo Covid (CMC), en Balboa, opera con médicos del Minsa y personal del Canal. Se ha implementado un plan integral de respuesta con el objetivo de reducir los contagios entre los trabajadores canaleros, y no afectar las operaciones de la vía acuática.
Detectar y validar los contagios; hacer la trazabilidad; entrega de kit de medicamentos; seguimiento a cada trabajador en cuarentena domiciliaria; o el traslado de quien requiera hospitalización. Además, se aplica la prueba serológica a todo trabajador que retornó de vacaciones y/o de teletrabajo y más recientemente, el hisopado superficial a toda la fuerza laboral, con el fin de detectar a los asintomáticos, y así aislarlos hasta superar la enfermedad.
Al 29 de marzo pasado, el Canal de Panamá perdió a 19 trabajadores; sumaba 1,552 contagios; 1,516 recuperados; 15 estaban en asilamiento domiciliario y dos hospitalizados.
Mirada positiva
El administrador del Canal, Ricaurte Vásquez Morales, expresó que pese a enfrentar bajos niveles de agua y las disputas comerciales de sus principales clientes (Estados Unidos y la República Popular China), hubo resultados a la par de los registrados a inicio del año fiscal 2019.
Ello, subrayó el Administrador, gracias a nuestro equipo de talla mundial. No ajeno a los vaivenes del mercado, nuestro equipo tomó una serie de acciones rápidas que permitieron que la vía acuática continuara operando de manera segura y conectando al mundo cuando más se necesitaba.
En el Canal, nuestro norte es claro: seguir prestando un servicio competitivo, con un equipo de talla mundial que responda con dinamismo al mercado marítimo mundial.