En medio de la lucha para prevenir los contagios de la COVID-19 y atender las afectaciones que conlleva esta enfermedad, debemos reconocer más que nunca la importancia de atender nuestra salud y mantenerla en óptimas condiciones, controlando aquellos factores que la pueden deteriorar y adoptando hábitos de vida que la favorezcan.

Con la pandemia, las enfermedades crónicas no transmisibles (sobre todo las del sistema circulatorio) han aumentado considerablemente, y se han constituido en las principales causas de muerte en Panamá, con más del 25 % de todas las muertes del país.

Una combinación de factores

Además del padecimiento físico, la pandemia acrecentó la presión emocional en las personas y aumentó el sendentarismo, pero la combinación de esto con costumbres culturales muy arraigadas provocó un aumento generalizado. La ingesta de alimentos altos en sodio (sal) y con grasas saturadas, hizo dura mella en la población del país. En los análisis de salud realizados en el año fiscal 2021, una parte de la fuerza laboral del Canal mostró niveles de presión arterial por arriba de lo recomendado. Esto hizo que una de las iniciativas para el año fiscal 2022, fuera dar seguimiento a través de evaluaciones periódicas de presión en las clínicas de salud, la referencia hacia médicos especialistas en caso de considerarse necesario, y el uso de guías de promoción sobre el cuidado de la presión arterial y la buena alimentación.

La hipertensión arterial es una de las enfermedades crónicas no transmisible que sufre más del 33 % de la población panameña adulta y es aquella donde la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias, con el transcurso del tiempo, es lo suficientemente alta como para causar problemas de salud, como una enfermedad cardíaca. Tener la presión arterial alta durante años sin presentar ningún síntoma y mantenerla de esa forma, aumenta el riesgo de padecer graves problemas de salud, como un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular. Afortunadamente, la presión arterial alta se puede detectar fácilmente y, una vez se sabe que se tiene presión arterial alta, se puede trabajar para controlarla.

¿Cómo inciden los problemas de hipertensión en el rendimiento laboral?

El entorno laboral es donde el trabajador permanece la mayor parte de su tiempo diario, y donde para mantenerse productivo, requiere estar presente y sentirse bien. La hipertensión arterial es una enfermedad que suele ser asintomática; es decir, en muchas ocasiones cursa sin síntomas, de ahí que mantener un descontrol de la presión arterial podría causar serios problemas de salud a una persona que trabaja.

El factor de la edad

Uno de los factores que incide en el aumento de la presión arterial es precisamente, envejecer. La hipertensión no avisa, tiene pocos o ningún síntoma. Ese es justo el factor que causa un evento que desencadena una crisis, tristemente fatal, en algunos casos. La edad no debe ser una excusa para tener mala salud. Si bien los niveles de presión aumentan con la edad, comer saludable y hacer ejercicio, por lo menos 30 minutos diarios, ayudan a sostener la salud en buen estado.

Medidas internas

El Canal de Panamá mantiene un programa de mejoras para la salud de la fuerza laboral y este agrupa distintos programas: evaluaciones médicas, nutrición, fortalecimiento para el trabajo, psicología corporativa (apoyo emocional, alcohol y drogas), inmunización, manejo de la COVID-19 y acondicionamiento físico. Las acciones de promoción y concienciación son importantes porque hay que insistir en la importancia del autocuidado.

Rubén Carrasco

Reparador de maquinaria náutica

Yo me sentía bien, solo tenía una leve molestia en la cabeza por las mañanas. En una de las visitas de las enfermeras al taller me salió que tenía la presión alta. Me estoy atendiendo con un médico y cambié mi alimentación. Nada de dulces, ni sodas. Quiero estar sano porque me falta un año para jubilarme y quiero disfrutar de mi tiempo con salud. Ya me acostumbré al café sin azúcar.

Roberto Delgado

Asistente de venta de bienes excedentes

Para mí fue un evento muy intenso. Estaba en mi escritorio un día de mucho estrés. Mis compañeros me vieron la cara roja y me convencieron de ir a la clínica. De allí, estuve 4 días hospitalizado. Pensé tantas cosas, sobre todo en mi hija. Ahora con mi médico nos dimos cuenta de que, aunque no tenía síntomas tenía todos los factores, y esa distracción casi me cuesta la vida.

Abdiel Sobers

Guardia de seguridad, supervisor

Yo no tenía síntomas de ningún tipo, pero en una de las revisiones de salud en el trabajo me salió que mi presión estaba por encima de lo normal. Me refirieron a un especialista, que me hizo recomendaciones para cambiar mi estilo de vida. Reduje las porciones de comida e incluí más ensaladas. Lo más importante fue cuidar mis horas de sueño, eso hizo una gran diferencia. Me lo tomo muy en serio, llevo un registro escrito de mis datos diariamente.